Denuncian a dbnews y piden su cierre

En esta ocasión, el asunto espinoso que ha provocado denuncias es la ilegalidad cometida por el alcalde Pedro Rollán, de Torrejón de Ardoz, con su particular concepción del empadronamiento de inmigrantes. Me he visto en la obligación de matizar alguno de los posts (Torrejón de Ardoz o la ilegalidad en la alcaldía, Las luces del alcalde de Torrejón, Al alcalde de Torrejón se le atraganta su padrón y da marcha atrás), porque su contenido era interpretado como "difamatorio", que incurre en la calumnia y la injuria.

Tiene gracia que haya quien defienda a este alcalde que hace uso de la web municipal para sus intereses partidistas, como si se tratara de su propio blog, y que hoy mismo tiene el descaro de publicar una nota faltando a la verdad y haciéndose eco de una filtración sin confirmar. Pensar, como de hecho admite pensar, que la nueva ley sostiene las mismas medidas que defendía al ayuntamiento de Torrejón antes de que fueran declaradas ilegales por un informe de la Abogacía del Estado, es totalmente erróneo y malintencionado.

Una cosa es querer evitar y detectar el hacinamiento con un número elevado de personas dentro de un mismo inmueble y otra muy distinta limitar el espacio a 20 metros cuadrados por persona. ¿Cuántas familias de 4 miembros conocen ustedes viviendo en 70 metros cuadrados? Yo, desgraciadamente, muchas, y esa familia, inmigrante o no, no tendría derecho a educación ni sanidad -para lo que es imprescindible el padrón- según Rollán.

Siento pena por aquellos que piden el cierre de dbnews. En esta ocasión ha sido por la denuncia de conductas, a mi modo de ver, xenófobas. En otra ocasión, hace muy poco, me expulsaron de Blogueros y Corresponsales de la Revolución por criticar a Chávez, el mismo que tan sólo unos días después cerraba la cadena de televisión de Venezuela más antigua por no querer transmitir sus discursos populistas -y en cuyas protestas moría de un tiro una chicade 15 años.

Habrá más quejas, más denuncias, no me cabe duda, porque los colectivos a los que suelo criticar -políticos de todo signo, Iglesia católica, seguidores de la ultraderecha, empresarios sin escrúpulos, etc.- parecen ser más amigos de la censura que de la dialéctica.

Lástima. Esta palabra comienza a aparecer demasiadas veces en dbnews.

PD. En mi próximo post, me extenderé un poco más hablando sobre la empresa unipersonal de Tomelloso.