A la Bastilla con pocas luces
Mañana se celebrará la subasta que determinará el coste de la energía para el tercer trimestre del año. Son malas noticias, porque presumiblemente caerá una nueva subida de la luz, la enémisa, y los consumidores pagaremos los platos rotos. Lo más sospechoso de todo es que, a pesar de que el PP acuse el Gobierno de una mala política energética, elevando este hecho como causa de las subidas, el partido de Rajoy ha de salir a la palestra para negar que la subida de precio esté ya pactada de antemano.
Este tipo de negativas públicas siempre son sospechosas, porque el mero hecho de que se realicen da qué pensar. Y en el otro extremo de la cuerda nos encontramos los ciudadanos de a pie, que somos los que estamos dando el callo para salir de esta puñetera crisis. ¿Verdad que tienen la impresión de que nuestros gobernantes -entendiendo a éstos también a la oposición-, cuando tienen que elegir entre inclinar la balanza del lado de las empresas o de los ciudadanos, lo hacen del lado de las primeras?
Pues cuando tantos tenemos esa impresión, quizás es que se trata de la cruda realidad. ¿Es que no vamos a ser capaces de darle la vuelta a esta situación? Deberíamos porque, no lo olviden nunca, en una democracia el poder lo han de tener los ciudadanos, no los políticos. Pero para eso hemos de tener la voluntad necesaria.
En pocas palabras: ¡a la Bastilla!
PD. Todos tenemos un mal día, ¿no?
Este tipo de negativas públicas siempre son sospechosas, porque el mero hecho de que se realicen da qué pensar. Y en el otro extremo de la cuerda nos encontramos los ciudadanos de a pie, que somos los que estamos dando el callo para salir de esta puñetera crisis. ¿Verdad que tienen la impresión de que nuestros gobernantes -entendiendo a éstos también a la oposición-, cuando tienen que elegir entre inclinar la balanza del lado de las empresas o de los ciudadanos, lo hacen del lado de las primeras?
Pues cuando tantos tenemos esa impresión, quizás es que se trata de la cruda realidad. ¿Es que no vamos a ser capaces de darle la vuelta a esta situación? Deberíamos porque, no lo olviden nunca, en una democracia el poder lo han de tener los ciudadanos, no los políticos. Pero para eso hemos de tener la voluntad necesaria.
En pocas palabras: ¡a la Bastilla!
PD. Todos tenemos un mal día, ¿no?
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