El PP se tiñe de cinismo racial

Leía esta mañana una información de Público y no sabía si había tecleado bien la dirección web o estaba en El Mundo Today. Me refiero a la noticia que habla de cómo "el PP presume de Obama español". El tratamiento de la información no ha sido el más acertado, pues se presenta a Juan Antonio de la Morena Doca, alcalde de Villamantilla, como un extranjero cuando no lo es. Y esa diferencia, cuando hablamos del PP, no es baladí. De la Morena nació en Malabo y es negro -parece que cuesta decirlo, y hay que utilizar eufemismo como 'de raza negra', ¿acaso decimos 'de raza india' o 'de raza china'?-, pero su padre era español y él vino a nuestro país con tres años.

Así pues, negro, pero español. Que es algo que parece que todavía nos cuesta entender. Hace tiempo que escribí en Interviú un reportaje que dibujaba precisamente esta problemática en el ámbito de la escena española, mostrando cómo actores y actrices españoles negros han de marcharse de España por sentirse extranjeros en su propio país. Lamentable.

En cualquier caso, lo que choca de la noticia, desde luego, es el uso político que hace el PP del color de sus militantes para captar el voto inmigrante. Y eso, también es lamentable. La integración se demuestra por otras vías, no a través de un vídeo en el que se autodenomina a De la Morena 'el Obama español'. Más que nada, porque el propio Obama jamás sacó partido con tanta desfachatez del color de su piel durante su campaña electoral . De hecho, durante las primarias contra Hillary Clinton, fue la actual secretaria de Estado la que sí quiso aprovechar su condición de mujer, pero Obama no.

Sorprende, por eso, que el alcalde de Villamantina se haya prestado a esta campaña, que en el fondo hace un flaco favor al colectivo afrodescendiente, pero supongo que la 'dictadura de partido' que rige en España -tanto en PP como en PSOE-, manda. Y sorprende también que el PP quiera dar este giro después de haber desplegado claras actitudes xenófobas con Xavier García Albiol, aspirante a la alcaldía de Badalona, a la cabeza. Ojalá el electorado estuviera formado e informado y castigara estas conductas en las urnas.
Ojalá.
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