A ingresar, que son dos días
Qué pena me ha dado escuchar esta mañana que el programa A vivir que son dos días, de Cadena Ser, haya fichado a Rosa García, vicepresidenta de Microsoft para Europa Occidental, para realizar la sección semanal de Nuevas Tecnologías.
El objetivo de la sección es mostrar cómo la tecnología penetra en la sociedad y la cambia, la mejora. Y García será la encargada de hablar de ello. Montserrat Domínguez, la conductora del programa, no ha tardado en aclarar que "no se trata de un espacio patrocinado por Microsoft" para, acto seguido, comenzar a hablar del proyecto desarrollado por la compañía de Gates en Ariño, un pequeño pueblo minero de Teruel, desde dónde se emitía hoy el programa.
¿Y por qué me da pena? Porque creo que hay gente más cercana a la sociedad española que Rosa García y que sabe mucho más de tecnología que esta directiva que, presumiblemente, estará más tiempo viajando por Europa que en España. Además, lo ideal sería haber cogido a uno de los miles de expertos que no están ligados a una multinacional, a alguien que igual habla de Microsoft que de Linux, con la misma libertad.
Es como si hubieran pillado a Rajoy para hablar de la salud de los partidos políticos en España. Desde luego, Rosa García no ha empezado con buen pie y lo tendrá muy difícil para convencernos de que no barre para casa.
Imagino que, aunque no sea un espacio patricinado, la publicidad ha caído en picado. La SER ya hace hasta cuñas pidiendo a los anunciantes que se dejen los euros. Corren malos tiempos para todos, para la SER y sus ingresos y para los oyentes, que corren el riesgo -a lo mejor no- de tener una visión de las nuevas tecnologías descafeinadas.
El objetivo de la sección es mostrar cómo la tecnología penetra en la sociedad y la cambia, la mejora. Y García será la encargada de hablar de ello. Montserrat Domínguez, la conductora del programa, no ha tardado en aclarar que "no se trata de un espacio patrocinado por Microsoft" para, acto seguido, comenzar a hablar del proyecto desarrollado por la compañía de Gates en Ariño, un pequeño pueblo minero de Teruel, desde dónde se emitía hoy el programa.
¿Y por qué me da pena? Porque creo que hay gente más cercana a la sociedad española que Rosa García y que sabe mucho más de tecnología que esta directiva que, presumiblemente, estará más tiempo viajando por Europa que en España. Además, lo ideal sería haber cogido a uno de los miles de expertos que no están ligados a una multinacional, a alguien que igual habla de Microsoft que de Linux, con la misma libertad.
Es como si hubieran pillado a Rajoy para hablar de la salud de los partidos políticos en España. Desde luego, Rosa García no ha empezado con buen pie y lo tendrá muy difícil para convencernos de que no barre para casa.
Imagino que, aunque no sea un espacio patricinado, la publicidad ha caído en picado. La SER ya hace hasta cuñas pidiendo a los anunciantes que se dejen los euros. Corren malos tiempos para todos, para la SER y sus ingresos y para los oyentes, que corren el riesgo -a lo mejor no- de tener una visión de las nuevas tecnologías descafeinadas.
He visto el enlace de tu blog en un comenario tuyo a Fernando Berlín en el FB. Yo no soy periodista, pero a mí me gusta tu blog. Me parece muy acertado este comentario tuyo sobre la incorporación de Rosa García. Creo que deberían buscar a alguien imparcial para ese puesto.
ResponderEliminarUn saludo.
Muchas gracias, Ana. Claro, yo también lo pienso, salvo que se diga abiertamente que hay un acuerdo comercial, lo más objetivo parece coger a uno de los expertos que hay, el mismo Chema Puente que hacer SER Digital, por ejemplo.
ResponderEliminar