Toshiba + PC City = Vía crucis del autónomo

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(Vía Computerworld Blogs)
Esta es la historia de un autónomo que adquirió para su trabajo el primer netbook que lanzó Toshiba al mercado: el NB100. Lo compró en PC City. Todo iba bien hasta que un buen día el ordenador comenzó a recalentarse de más, la CPU a escalar hasta el 100% de rendimiento y, tras un buen calentón, apagarse sólo. Visitando numerosos foros de Internet, el usuario pudo comprobar que es un problema bastante habitual en este modelo de Toshiba, lo que hace pensar en un error de fabricación. El autónomo, alarmado por la probabilidad de que la placa del netbook se achicharrase corrió al servicio técnico del fabricante; a fin de cuentas, este producto cuenta con una garantía de dos años y ni siquiera había pasado un año y medio desde la compra.

En el servicio técnico, le indicaron que Toshiba matiene un acuerdo con PC City en virtud del cual las repaciones de los equipos comprados allí han de realizarse en el punto de venta. Lamentando la confusión por el paseo que ya había hecho en balde un día laborable, el autónomo se dirigió a PC City, donde le indicaron que ellos no se hacían responsables del netbook. El pobre autónomo se desoló. Ya era bastante complicado estar sin el equipo (con el que se gana el pan) durante tres semanas -tiempo que estimaron en el servicio técnico oficial que duraría la reparación- sino que, además, ahora ni siquiera se lo querían reparar. Decidió llamar a la central de PC City que, cómo no, era un 902.

En la central le indicaron que desconocían el acuerdo y que, además, el periodo de garantía tan sólo era de un año. "No es así, señorita, me lo acaban de confirmar en el servicio oficial y si usted va a la página web de Toshiba lo podrá comprobar". La operadora ni siquiera sabía dónde encontrar los periodos de garantía de Toshiba en la página web y, finalmente, resolvió que el autónomo enviara por fax una notificación de que ese ordenador tenía dos años de garantía "y veremos". El trabajador, viendo peligrar su sustento por no tener ordenador, llamó directamente a Toshiba que optó por lavarse las manos indicando que "es PC City quien se tiene que hacer cargo y conocer nuestro acuerdo". Y mientras el autónomo, sin equipo, sin poder trabajar y sin nadie que le dé una solución.

Ojalá fuera un cuento, uno de esos relatos de verano que se publican en los dominicales. Pero no es así, es la cruda realidad que ustedes mismos pueden multiplicar por el número de autónomos que hay en España. Viva la productividad, viva la eficiencia y, sobre todo, el apoyo de los fabricantes a las pymes y los autónomos.
En fin...
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