Telefónica asesina a la tarifa plana
Pasan los días y lo que comenzó como un globo sonda lanzado por Telefónica en los cursos de verano de la Universidad Menénez Pelayo va cobrando forma. Miguel Ángel Criado firma un artículo en Público en el que explica con todo lujo de detalles cómo es posible que digamos adiós a la tarifa plana de Internet.
Telefónica ya ha movido ficha en Reino Unido, donde ha comenzado a priorizar a unos internautas sobre otros, y sus planes pasan por hacer lo mismo en España. Lo que más me sorprende en todo esto no es la actitud carroñera de la compañía de Alierta, sino la previsible -disculpen la expresión- bajada de pantalones de la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT). Es hora de revisar las tarifas y no se descarta en absoluto que con vistas a 2012 la CMT dé el beneplácito. Tanto Telefónica, que sigue siendo el operador dominante, como el resto de sus competidores se frotan las manos.
Sencillamente es una vergüenza. Se ha criticado mucho que España estuviera por detrás en lo que han tenido a bien llamar la Sociedad de la Información pero, realmente, los españoles tenemos mucho más mérito que el resto de los europeos. ¿Por qué? Sencillo, porque hemos sido capaces de alcanzar el 50% de penetración de Internet a pesar de tener uno de los servicios más caros y, al mismo, más deficiente de toda la Unión Europea. Nos deberían dar un premio, oigan.
Y mientras, tanto la CMT como el ministerio de Industria se posicionan del lado de las empresas y no del ciudadano -como viene siendo norma en los últimos tiempos-. Pues bien, si finalmente deciden boicotear el derecho universal de acceso a Internet -al menos, así debería ser-, que las operadoras también queden sujetas a sanciones ejemplares cuando incumplan con el ancho de banda contratado que, básicamente, es siempre. Si usted contrata 6 MB tendrá 3 y si contrata 3... bueno, mejor no sigo.
Telefónica ya ha movido ficha en Reino Unido, donde ha comenzado a priorizar a unos internautas sobre otros, y sus planes pasan por hacer lo mismo en España. Lo que más me sorprende en todo esto no es la actitud carroñera de la compañía de Alierta, sino la previsible -disculpen la expresión- bajada de pantalones de la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT). Es hora de revisar las tarifas y no se descarta en absoluto que con vistas a 2012 la CMT dé el beneplácito. Tanto Telefónica, que sigue siendo el operador dominante, como el resto de sus competidores se frotan las manos.
Sencillamente es una vergüenza. Se ha criticado mucho que España estuviera por detrás en lo que han tenido a bien llamar la Sociedad de la Información pero, realmente, los españoles tenemos mucho más mérito que el resto de los europeos. ¿Por qué? Sencillo, porque hemos sido capaces de alcanzar el 50% de penetración de Internet a pesar de tener uno de los servicios más caros y, al mismo, más deficiente de toda la Unión Europea. Nos deberían dar un premio, oigan.
Y mientras, tanto la CMT como el ministerio de Industria se posicionan del lado de las empresas y no del ciudadano -como viene siendo norma en los últimos tiempos-. Pues bien, si finalmente deciden boicotear el derecho universal de acceso a Internet -al menos, así debería ser-, que las operadoras también queden sujetas a sanciones ejemplares cuando incumplan con el ancho de banda contratado que, básicamente, es siempre. Si usted contrata 6 MB tendrá 3 y si contrata 3... bueno, mejor no sigo.
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