Cuatro siglos de ciencia en internet


La Royal Society, Premio Príncipe de Asturias de la Comunicación y Humanidades 2011, acaba de abrir su archivo histórico a través de internet. En ocasiones anteriores había dado acceso libre a parte de sus publicaciones, pero ahora es posible acceder a su buque insignia, Philosophical Transactions, 24 horas al día, siete días a la semana.

No solo es posible encontrar artículos de descubrimientos como el espectro luminoso por Isaac Newton, el pararrayos de Benjamin Franklin, los agujeros negros de Stephen Hawking o la doble hélice de ADN de Francis Crick y James Watson; sino que se ilustran todo tipo de experimentos fascinantes, desde transfusiones de sangre entre una oveja y un hombre o cómo para describir los efectos de la intoxicación por dióxido de carbono, John Haldane se introdujo en un cámara de gas. Más de 60.000 artículos científicos cuyo origen data del 6 de marzo de 1665.

Philosophical Transactions (The Royal Society)
Detrás del proyecto se encuentran muchos años de duro trabajo. La digitalización se ha llevado a cabo gracias a JSTOR (acrónimo en inglés de Journal Storage, almacenamiento de publicaciones), una organización sin ánimo de lucro afincada en Nueva York. Esta organización asumió el coste del proyecto sin que se haya precisado más inversión por parte de sociedad británica que el pago de una licencia de 10.000 dólares.

La participación de JSTOR se centró fundamentalmente en los artículos anteriores a enero de 1997, pues a partir de esta fecha la Royal Society comenzó a generalizar el uso electrónico de la información. Sólo en documentación desde el primer número del Philosophical Transactions se digitalizaron exactamente 693.780 páginas, tanto texto como imágenes en alta resolución. En total, 1,2 terabytes de información, según precisa el doctor Stuart Taylor, director comercial de la Royal Society.

Desde el punto de vista tecnológico, la digitalización aprovecha las ventajas del software de reconocimiento óptico de caracteres de manera que es posible realizar búsquedas de palabras específicas en los textos, indexarlo y simplificar la lectura en los e-readers. Sin embargo, aparecieron algunas dificultades en este proceso. Así, en los primeros artículos del Philosophical Transactions, que están escritos a mano, figuraba la ‘s’ larga y otros caracteres tipográficos poco usuales.

A ello se sumaba la profusión de textos en latín, francés e italiano. Como consecuencia de ello, fue necesario reescribir cerca de 40.000 páginas para que contaran con los estándares de calidad deseados. Sólo el control de calidad de la post-digitalización llevó 6.000 horas, a las que habría que sumar otras 6.000 para incorporar el software de reconocimiento óptico de caracteres. Por su parte, el buscador que permite filtros por tema, autor, fecha o palabras clave, ha sido concebido de manera conjunta por la propia JSTOR y un equipo de desarrolladores de la Universidad de Michigan.

Derechos de autor
El que fuera máximo responsable de Publicaciones de la Royal Society en la década de los 2000 y actual presidente del consejo de administración de la Fundación de Ciencias Web, John Taylor, fue una de las personas implicadas en el proyecto. Él mismo relata lo complejo de los aspectos legales, dado que planteaba una posible vulneración de la ley de propiedad intelectual. JSTOR está en Nueva York y el proyecto debía cumplir con sus leyes de derechos de autor, así como con las federales vigentes en EEUU.

Asimismo, como la Royal Society se encuentra en Londres, debía cumplirse también con la legislación de Reino Unido. Tres jurisdicciones distintas que “chocaban en algunos puntos”, indica Taylor, para añadir después que “tras más de un año de discusiones y constante consejo legal” el proyecto comenzó su ejecución en mayo de 1999.

Respiración asistida a un perro (Wellcome Library, London)
Ciencia de libre acceso
El anuncio se ha hecho público durante la Semana de Libre Acceso (Open Access Week), evento mundial que se celebra por quinto año consecutivo y que defiende el acceso online gratuito, inmediato a las investigaciones académicas, así como al derecho a utilizar y reutilizar sus resultados. El director comercial señala que “nuestra combinación de opciones de acceso abierto, así como nuestro trabajo para poner la información a disposición de forma gratuita a los científicos del mundo en desarrollo, todo ello contribuye al objetivo de avanzar en la ciencia”. 

En esta línea, recientemente se anunció Open Biology, su primera publicación de acceso totalmente libre. En algunos casos, no obstante, imponen algunos plazos: los artículos de Proceedings B desde 2001 hasta ahora sólo se pueden consultar un año después de su publicación, mientras que en el caso de Proceedings A, los artículos post-2001 requieren de un plazo de dos años para que vean la luz en internet. Asimismo, las publicaciones más jóvenes del Royal Society, esto es, Biology Letters e Interface respetan también el plazo de un año para su acceso libre.

Casos históricos
1667
Respiración con fuelle Robert Hooke fue ayudante del físico Robert Boyle en la construcción de la bomba de aire. Cuando la Royal Society le solicitó una demostración, Hooke se presentó con un perro con el tórax abierto, conectado a dos fuelles. Con un fuelle le proporcionó aire fresco, manteniendo al perro vivo durante horas. Con el segundo fuelle, produjo una presión positiva a través de un rápido bombeo, perforó los pulmones y mantuvo al perro vivo. 250 años después, se utilizó este fundamento para el primer ventilador de utilidad clínica para bombear aire a través de la tráquea.

Técnica para calibrar la vista (Wellcome Library, London)
1727
Calibrar la vista William Cheselden fue un cirujano que consiguió que un niño de 14 años, ciego de nacimiento, recuperara la vista. Las investigaciones posteriores revelaron al cirujano que, si bien el muchacho distinguía los colores, no era capaz de calcular la distancia entre objetos. En la actualidad, los estudios con animales han desvelado que buena parte de los mecanismos neuronales de la visión son innatos, pero que la experiencia es imprescindible para ajustar el sistema.

Capitán Cook (The Royal Society)
1776
Pintas de malta contra el escorbuto El capitán James Cook, en su segundo viaje (1772-1775) que casi le lleva a toparse con la Antártida, descubrió los efectos beneficiosos de la malta para combatir el escorbuto. En su artículo para la Royal Society escribió que “teníamos abordo grandes cantidades de malta y cada hombre tomaba al día entre una y dos pintas”. Cook llegó a cuestionar los limones y las naranjas como remedio para el escorbuto, que en su época era capaz de llevarse por delante a las dos tercios de la tripulación. Aún se duda si en su caso fue la malta o, sencillamente, la reposición frecuente de alimentos frescos la que combatió el escorbuto.

1891
El primo de Darwin y las huellas dactilares Francis Galton, primo segundo de Charles Darwin, era un obseso de la catalogación, la clasificación y la medición. Eso fue lo que le llevó a descubrir que las huellas dactilares eran únicas y servían para identificar a las personas. Scotland Yard adoptó entonces este método que aún hoy se utiliza en todo el mundo. Es el padre de la frase ‘nature versus nurture’ (nace o se hace) y de la eugenesia (aplicación de las leyes biológicas de la herencia al perfeccionamiento de la especie humana).

(Reportaje en Público, octubre 2011)
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