Cospedal está aplicando, de nuevo, el
SANTA: Las ocho mil pesetas, por ejemplo. ¿Cuánto valen ocho mil
pesetas?
[Lino lo mira sin entender]
LINO: ¿En euros?
SANTA: En pesetas. ¿Cuánto valen ocho mil pesetas en pesetas?
LINO [Se encoge de hombros] Ocho mil pesetas.
SANTA: Pues no. Pues no. ¿Lo ves? Para mí ahora, moralmente valen
mucho más.
RICO [Duda] ¿Diez mil?
SANTA: Mucho más. Diez millones. Más. Cien mil.
LINO: Joder, Santa, qué chorradas dices, cómo van a valer ocho mil pesetas
cien mil millones.
Y los valen, vaya si lo saben. Pero de eso, Cospedal, la bien pagá que recibía tres sueldos a la vez superando el cuarto de millón de euros al año, que se casó un alto directivo que amasó una fortuna chupando de las Cajas (siendo partícipe de la quiebra de Caja Castilla-La Mancha) y luego lo colocó en otros consejos administrativos... esa, no tiene ni idea de lo que valen ni ocho mil pesetas, ni 40 euros.
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