En noviembre del año pasado escribí el artículo Por qué Zoido inquieta... y mucho me temo que estos meses transcurridos desde entonces han respondido a esta pregunta. El ministro de Interior, por muy católico que presuma ser, hace desplegado una inhumanidad que ya no sólo inquieta, sino que aterra.
Seguir leyendo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario