Retoques, tocadas y re-tocadas

De unas semanas para acá nos encontramos en pleno debate sobre los retoques fotográficos -dejando a un lados los 'simpáticos' realizados con la Casa Blanca de escenario-. La gota que colmó el vaso fue el retoque que Ralph Lauren hizo en una de sus últimas publicidades, a todas luces excesivo. Ahora, aprovechando el tirón de la polémica, la revista Elle ha publicado fotos de top models españolas sin maquillaje, esto es, si tocarlas ni re-tocarlas (se da por hecho que también si retoque informático).

¿Saben qué es lo que más me indigna de esta polémica? Que retoquen a modelos me da lo mismo, porque la batalla contra la delgadez extrema se dió por perdida hace tiempo, cuando dejó de prestarse atención al índice mínimo de masa corporal tras la primera edición de Cibeles en que se impuso.

Lo que más me molesta es la campaña gratuita de publicidad que le están haciendo al programa informático de retoque fotográfico que, lógicamente, no seré yo quien mencione aquí... y todo por puro desconocimiento e ignorancia del 99% de los que tratan el tema. Hay muchísimos otros programas, algunos de ellos incluso gratuitos y de un rendimiento excelente, con los que poder hacer esos trabajos o, en el caso del christma de la Casa Real, esas chapuzas.

En cualquier caso, me sigue fastidiando más que me retoquen la imagen del plato combinado que voy a comer o de la hamburguesa que me voy a zampar que la foto de turno de Pitita Ridruejo, sinceramente.
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