El día que Afganistán se hizo rico

La guerra entre Afganistán y EEUU podría dar un giro copernicano. ¿La razón? Se acaba de encontrar un yacimiento de metales preciosos. Según informa el New York Times, EEUU habría localizado yacimientos de oro, cobre, cobalto, hierro o litio -éste especialmente interesante puesto que se emplea en las baterías de muchos dispositivos electrónicos.

A pesar de que desarrollar una industria minera puede llevar años, el hallazgo podría dotar al gobierno afgano de nuevos apoyos y un fortalecimiento de su economía, hasta ahora sustentada en el opio. Ya se teme que países como China intervengan en la guerra, movidos por los intereses económicos ligados al yacimiento. En realidad, sorprende el hallazgo, no el hecho de que comience el baile de países que pueden cambiar el curso de la guerra. Ya ha sucedido antes.

Las guerras del Congo es el mejor ejemplo de estas guerras interesadas -cuál no lo es-, aunque, si tuviéramos que citar a otra, aún más cercana, sin duda nos referiríamos a la mantenida entre Marruecos y el Sáhara Occidental y que ha llevado a la ocupación ilegal por parte del reino dictadura de Mohamed VI, respaldado por el silencio de la Comunidad Internacional.

¿El papel de la ONU? Casi con toda seguridad, volverá a dejar mucho que desear, más aún teniendo en cuenta la implicación de EEUU en el conflicto. Presumiblemente se limitará únicamente a la ayuda humanitaria, que si bien es necesaria no es suficiente. Ojalá no sea así.
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