Israel y la impunidad asesina
El mundo no aprende la lección. Al margen del debate Guerra Sí/Guerra No, lo que es una realidad innegable que es cada muerto de los que caen ahora en Libia lo hacen con la complicidad de la Comunidad Internacional... con balas fabricadas en Occidente. Cuando uno ha envenenado a un país, de nada sirve para limpiar la culpa tratar de busca un antídoto a posteriori. La ponzoña ya ha hecho su efecto.
¿Quién ha condenado los bombardeos de Israel en Gaza? ¿ A alguien le importa lo que está sucediendo en Yemen? ¿Y la inminente guerra civil de Costa de Marfil? ¿Por qué no existe un mismo rasero para todos los conflictos? Las relaciones internacionales son complejas, mucho, sobre todo cuando se conjugan los intereses geo-estratégicos y económicos.
Izquierda Unida es, de lejos, la formación política más íntegra en España, porque no da vaivenes en su discurso, esté equivocado o no. Supongo que no gozar prácticamente de poder, lo que impide su contaminación, es un factor que contribuye a ello. Pero la historia nos dice que el único político que no estrechó la mano de Gadafi en su última visita a España fue Llamazares. Por eso cuando ahora le escucho criticar la guerra, veo que cuenta con más legitimidad que ningún otro para hacerlo. En este caso y alcanzado este punto, parece que la intervención militar era inevitable, pero en algo tiene razón Llamazares: "Occidente no es el gendarme de nadie" y "existen muchísimos mecanismos diplomáticos para no tener que recurrir a la guerra".
Miremos, por ejemplo, a Israel que supone un claro ejemplo de doble rasero. Y si no, vean la sucesión de acontecimientos que acompañaron hace dos años a su famosa operación 'Plomo fundido'. Pero no nos vayamos tan lejos: ¿saben cuál fue el valor de las operaciones aprobadas por el Gobierno español en los primeros seis meses de 2010 para la venta de armas a Israle? 5,6 millones de euros: 3 millones en vehículos terrestres y 2,6 millones en aeronaves.
¿Por qué seguimos envenenando a los países? Ayer, un paquete bomba sesgaba la vida de una persona y hería a otras 30 en Jerusalem. Se desconoce la autoría del atentando; en cambio, sí sabemos que quien mató a ocho personas en Gaza fue el gobierno de Benjamín Netanyahu... quizás con armamento español. Israel culpa a Hamás y a la Yihad Islámica de la explosión en Jerusalem y, mientras algunos pronosticaban una contundente respuesta en Gaza, ésta ya se estaba produciendo: nuevos bombardeos que dejan a oscuras buena parte de la franja.
Y la Comunidad Internacional, en silencio, incluso, fabricando más veneno para Israel que, como bien apunta Ángeles Espinosa en El País, continúa utilizando "la causa palestina como excusa para su falta de democratización". Y los recursos diplomáticos de los que hablaba ayer mismo Llamazares, ni han llegado ni se les espera.
El mundo no aprende la lección.
¿Quién ha condenado los bombardeos de Israel en Gaza? ¿ A alguien le importa lo que está sucediendo en Yemen? ¿Y la inminente guerra civil de Costa de Marfil? ¿Por qué no existe un mismo rasero para todos los conflictos? Las relaciones internacionales son complejas, mucho, sobre todo cuando se conjugan los intereses geo-estratégicos y económicos.
Izquierda Unida es, de lejos, la formación política más íntegra en España, porque no da vaivenes en su discurso, esté equivocado o no. Supongo que no gozar prácticamente de poder, lo que impide su contaminación, es un factor que contribuye a ello. Pero la historia nos dice que el único político que no estrechó la mano de Gadafi en su última visita a España fue Llamazares. Por eso cuando ahora le escucho criticar la guerra, veo que cuenta con más legitimidad que ningún otro para hacerlo. En este caso y alcanzado este punto, parece que la intervención militar era inevitable, pero en algo tiene razón Llamazares: "Occidente no es el gendarme de nadie" y "existen muchísimos mecanismos diplomáticos para no tener que recurrir a la guerra".
Miremos, por ejemplo, a Israel que supone un claro ejemplo de doble rasero. Y si no, vean la sucesión de acontecimientos que acompañaron hace dos años a su famosa operación 'Plomo fundido'. Pero no nos vayamos tan lejos: ¿saben cuál fue el valor de las operaciones aprobadas por el Gobierno español en los primeros seis meses de 2010 para la venta de armas a Israle? 5,6 millones de euros: 3 millones en vehículos terrestres y 2,6 millones en aeronaves.
¿Por qué seguimos envenenando a los países? Ayer, un paquete bomba sesgaba la vida de una persona y hería a otras 30 en Jerusalem. Se desconoce la autoría del atentando; en cambio, sí sabemos que quien mató a ocho personas en Gaza fue el gobierno de Benjamín Netanyahu... quizás con armamento español. Israel culpa a Hamás y a la Yihad Islámica de la explosión en Jerusalem y, mientras algunos pronosticaban una contundente respuesta en Gaza, ésta ya se estaba produciendo: nuevos bombardeos que dejan a oscuras buena parte de la franja.
Y la Comunidad Internacional, en silencio, incluso, fabricando más veneno para Israel que, como bien apunta Ángeles Espinosa en El País, continúa utilizando "la causa palestina como excusa para su falta de democratización". Y los recursos diplomáticos de los que hablaba ayer mismo Llamazares, ni han llegado ni se les espera.
El mundo no aprende la lección.
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