Si España es Grecia, Madrid será Atenas

La delegada de Gobierno de Madrid, Cristina Cifuentes, lanzó ayer un aviso a navegantes: "Madrid no será Atenas"... pero si España ya es Grecia, ¿no parece algo inevitable? A menos que quienes nos gobiernan cambien el rumbo y la actitud, esa que incendia las redes sociales con aplausos y risotadas de diputados y senadores cuando Rajoy anuncia recortes... Esa que llevó ayer a la hija de Fabra a gritar un sonoro "Que se jodan" dirigido a los parados que ven cómo el Gobierno les acaba de dar otra puntilla con un nuevo recortazo de la prestación por desempleo.

Si yo fuera Fabra, temería por mi seguridad vista la reacción de las redes sociales y la pobreza y miseria que el PP ha extendido por España con sus medidas. Imaginen un padre de familia en paro, harto de echar currículums, al borde del desahucio a pesar de que su hipoteca nunca estuvo por encima de sus posibilidades... pero claro, año y medio sin trabajar... y de pronto, tras el "que se jodan", se cruza por la calle a Fabra... o imaginen que trabaja en un restaurante y entra a comer esta diputada... la cantidad de condimentos que a buen seguro se tragará, ajena a la reproducción de su "que se jodan" entre los camareros con sueldo precario...

"Madrid no será Atenas". Tienen complicado evitarlo, aunque esté en su mano. Las agresiones que sufren los policías antidisturbios por parte de los violentos son reprobables, pero eso no justifica agresiones a ciudadanos ajenos a la manifestación como se aprecia en el vídeo de arriba. Como tampoco justifica que las pelotas de goma -que deberían estar prohibidas- sean disparadas directamente contra el cuerpo y no contra el suelo como dicta el reglamento para evitar muertes como la reciente del joven Cabacas (vídeo de abajo):

Madrid ya es Atenas. Y no parará. Ayer por la tarde se produjeron concentraciones espontáneas que, incluso, agruparon a policías. Y es que, los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado deberían proteger al pueblo y no a quienes lo estrangulan. No parecen hacerlo pero, con todo y aunque sólo piensen en ellos mismos, dado que las medidas también les afectan de pleno, Cifuentes verá cómo cada vez más sus antidisturbios, vistos como mercenarios, retroceden. Y el pueblo avanza.